La ermita de San Roque perteneció al
hospital del mismo nombre desde comienzos del s.XVII.
Es de una sola nave con coro a sus pies y campanil sobre el tejado. Su techumbre de madera se sustituyó por bóveda de cañón a principios del s.XIX. En la fachada se colgó en 1937 una cruz de hierro forjado con inscripción en mármol alusiva a la cárcel de católicos que fue durante el verano de 1936.
En 1950 se levantó el retablo que
preside la imagen de San Roque, patrón del pueblo. Al lado de la epístola se
abrió una capilla dedicada a San Antonio. En la segunda mitad del s.XX estuvo
instalado tras la ermita el Colegio “Cristo Rey”, regido por la Congregación de
las Hermanas de la Cruz.
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